Sacada
de la historia de María Santísima del Pilar, intitulada «España feliz,» que
compuso el R. P. Arbiol.
Imprenta
y librería de la Viuda de Cuesta e hijos, calle de Cantarranas, núms. 38 y 40.
Año 1889.
COMENZAMOS: 3 de octubre.
FINALIZAMOS: 11 de octubre.
FESTIVIDAD: 12 de octubre.
INDULGENCIAS.
Nuestro Santísimo Padre Clemente XIII ha
concedido muchas indulgencias a los que se inscribiesen en el libro de la Congregación
de MARÍA SANTÍSIMA DEL PILAR, que se venera
en la parroquia de Santiago de esta ciudad, de Valladolid, como consta de la
Bula que está en el archivo de dicha Congregación.
El Emmo. Sr. Cardenal D. Sabo Milini, Nuncio
que fué de su Santidad en estos reinos de España, concedió cien días de indulgencia
a todas las personas que en cada una de las horas que diere el reloj rezaren
una Ave María delante de cualquiera Imagen de Nuestra Señora del Pilar.
El Ilmo. Sr. D. Julián Domínguez Toledo, Obispo
que fué de esta Ciudad, concedió cuarenta días de indulgencia a todas las
personas que devotamente hicieren este santo Novenario, por cada uno de los
días.
Y también concede dicho Ilustrísimo Señor
otros cuarenta días de indulgencia a todas las personas que delante de alguna
imagen de nuestra Señora del Pilar, rezaren una Ave-María en cada una de las horas
que diere el reloj.
ADVERTENCIA
Este sagrado Novenario
se puede hacer nueve días continuos, o nueve sábados, por ser este día dedicado
a esta Señora. El
primer día se ha de confesar y recibir a Cristo Sacramentado; lo mismo se ha de
hacer en el último. Ayunar a uno de los nueve días, y si no pudiere, lo
conmutará en otra cosa, precediendo el consejo de su confesor. Cada día pedirá
a María Santísima del Pilar le adorne su alma con alguna virtud. Y en obsequio de
esta Reina Soberana se ejercitará en alguna obra buena. También se puede hacer
este Novenario delante de alguna estampa de Nuestra Señora del Pilar.
NOVENA A NUESTRA SEÑORA
DEL PILAR, VENERADA EN LA IGLESIA PARROQUIAL DE SANTIAGO APOSTOL DE ESTA CIUDA
DE VALLADOLID.
Para comenzar
se dirá:
Por
la señal ✠ de la santa Cruz; de nuestros ✠ enemigos
líbranos,
Señor
✠
Dios nuestro. En el nombre del Padre, y del Hijo ✠,
y del Espíritu
Santo. Amén.
ACTO DE CONTRICIÓN.
Señor mío Jesucristo,
Dios y Hombre verdadero, Criador y Redentor mío, por ser vos quien sois, y
porque os amo sobre todas las cosas, a mí me pesa, pésame Señor, de todo
corazón de haberos ofendido; y propongo firmemente de nunca más pecar, de
apartarme de todas las ocasiones de ofenderos, confesarme y cumplir la penitencia
que me fuere impuesta, restituir y satisfacer, si algo debiere; y por vuestro
amor perdono a todos mis enemigos; ofrezcoos mi vida, Obras y trabajos en
satisfacción de todos mis pecados: así como os lo suplico, asi confío en
vuestra bondad y misericordia infinita me los perdonareis por los méritos de vuestra
preciosísima sangre, pasión y muerte, y me daréis gracia para enmendarme y perseverar
en vuestro santo servicio hasta la muerte. Amén.
DÍA PRIMERO — 3 de octubre.
ORACIÓN AL SEÑOR.
Señor mío Jesucristo, Dios y Hombre
verdadero que te dignaste sublimar a
tu Santísima Madre sobre el primer coro de los Espíritus Celestes, que se compone
de Ángeles; y a muchos de ellos mandaste trajesen y acompañasen a su Reina y
Señora desde Jerusalén a España, para hacerla feliz con su venida; Suplicóte, piadosísimo Señor, que por la intercesión y méritos de
la que te dio el ser humano, me concedas la pureza de mi alma, para que en algún
modo me haga semejante a los Ángeles y Santos aun en esta vida mortal. Amén.
—Aquí se
rezarán nueve Ave-Marías á nuestra Señora en veneración de los grandes
privilegios y dones con que la ensalzó su Hijo Santísimo sobre los nueve coros
de los Ángeles.
ORACIÓN A MARÍA
SANTÍSIMA.
Soberana Reina de los Ángeles, ten misericordia de mí:
admíteme piadosa en el dichoso número de tus felices siervos y esclavos; y por
el grande amor con que, viviendo aun en carne mortal, viniste a España y nos
dejaste tu sagrada Imagen sobre la columna, te suplico me
alcances los divinos auxilios oportunos para hacer una verdadera confesión de todos
mis pecados, con perfecta contrición de todos ellos, y firme propósito de la
enmienda de mi vida. También te suplico, Madre piadosísima, que, si es del
agrado de mi Dios lo que deseo alcanzar en esta Novena, me lo consigas de su
Divina Majestad; y si no me conviene, perfecciones mis afectos para que nunca
desee sino lo que sea del mayor agrado de Dios y mi Señor, y en todo me
conforme con su santísima voluntad. Amén.
—Ahora
cada uno hará secretamente su petición por un breve rato a Dios nuestro Señor
teniendo por medianera a la Virgen María del Pilar; y luego se concluirá con la
siguiente
SALVE.
Dios
te salve, Reina y Madre de misericordia, vida y dulzura, esperanza nuestra,
Dios te salve: a ti llamamos los desterrados hijos de Eva, a ti suspiramos
gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. Ea, pues, Señora, Abogada
nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos; y después de este
destierro muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre, ¡Oh Clementísima! ¡Oh piadosa! ¡Oh dulce siempre Virgen María!
Ruega por nosotros santa Madre de Dios, para que seamos dignos de
alcanzar los prometimientos de Jesucristo. Amén.
GOZOS A NUESTRA SEÑORA
DEL PILAR.
Protectora
singular
de
la España en Aragón:
Conseguidnos
contrición,
Madre
de Dios del Pilar.
Con
sacro angélico tren
Vos,
¡oh Reina
celestial!
viniste
en carne mortal,
dejando
a Jerusalén:
Con
vuestra Imagen también
nos
quisiste consolar.
Conseguidnos
contrición,
Madre
de Dios del Pilar.
En
angélica carroza,
bella,
hermosa Peregrina,
cercada
de luz divina
vinisteis
a Zaragoza:
El
Pilar e Imagen goza
en
su primitivo altar.
Conseguidnos
contrición,
Madre
de Dios del Pilar.
Los
Paraninfos gloriosos,
que
postrados os sirvieron,
Pilar
é Imagen trajeron,
que
labraron primorosos:
Y
la capilla gozosos
vinieron
a trabajar.
Conseguidnos
contrición,
Madre
de Dios del Pilar.
Saludaron
a la Aurora
con
celestial melodía;
cantando
el Ave-María
vinieron
con Vos, Señora:
Como
aves de voz sonora
enseñaron
a cantar.
Conseguidnos
contrición,
Madre
de Dios del Pilar.
Como
María es mi ara,
y
la del Pilar primera,
era
muy justo se oyera
música
celeste y clara:
Para
que nos excitará,
nos
vinieron a entonar.
Conseguidnos
contrición.
Madre
de Dios del Pilar.
Llena
de gracia, María,
os
significa el rocío
de
Guedeon, que llenó pio
la
concha como pedía:
Conchas
también, Madre mía,
hallan
en este lugar.
Conseguidnos
contrición,
Madre
de Dios del Pilar.
Es
la concha en la esclavina
el
distintivo y blasón
de
Santiago, que es Patrón,
que
enseñó la fe divina:
Vos
fuisteis su Peregrina,
que
os hizo peregrinar
Conseguidnos
contrición,
Madre
de Dios del Pilar.
Como
cuello a la cabeza,
Vos
inclinaste al Señor,
y
se vistió con amor
de
nuestra naturaleza:
Por
Vos, columna y firmeza,
la
fe logra respirar.
Conseguidnos
contrición.
Madre
de Dios del Pilar.
Vuestra
Prima agradecida,
dice:
¿De dónde me
vino
tanto
bien y tan divino,
con
tan celestial venida?
En
vuestra Capilla santa
las
tres partes del Rosario
en
vuestro culto diario
la
devoción reza y canta;
A
los Ángeles encanta
y
al infierno hace temblar.
Conseguidnos
contrición,
Madre
de Dios del Pilar.
Contritos
de corazón
á
vuestros pies nos postramos,
y
el Pilar Santo adoramos;
dadnos
vuestra bendición:
para
lograr perdón,
lágrimas
que derramar.
Conseguidnos
contrición,
Madre
de Dios del Pilar.
Protectora
singular
De
la España en Aragón :
Conseguidnos
contrición,
Madre
de Dios del Pilar.
LAUS
DEO.
ORACIÓN.
Dios
todopoderoso, que,
con la cooperación del Espíritu Santo, preparaste el Cuerpo y el Alma de la
gloriosa Virgen Madre María para que fuera morada digna de tu Hijo; concédenos
alegrarnos en su conmemoración, por su piadosa intercesión seamos librados de
los males inmediatos y de la muerte perpetua. Por el mismo Cristo nuestro
Señor. Amén.
En el
nombre del Padre, y del Hijo ✠,
y del Espíritu Santo. Amén
DÍA SEGUNDO —4 de octubre
Por la Señal...
Acto de contrición
ORACIÓN AL SEÑOR.
Señor mío
Jesucristo, Hijo de Dios vivo y de María Santísima,
que te dignaste honrar a tu santísima Madre sobre todo el coro de los
Arcángeles y a muchos de ellos les mandaste que la acompañasen y trajesen a
España para hacer feliz a toda esta monarquía; Suplicóte, Clementísimo Señor, que por la intercesión y méritos de
tu divina Madre me concedas en intenso grado el que yo te amé con caridad
perfecta y que en algún modo participe la perfección de los santos Arcángeles
para mayor honra y gloria tuya. Amén.
—Aquí se
rezarán nueve Ave-Marías a nuestra Señora en veneración de los grandes
privilegios y dones con que la ensalzó su Hijo Santísimo sobre los nueve coros
de los Ángeles.
ORACIÓN
Á MARÍA
SANTÍSIMA.
Soberana
Reina de los Ángeles, ten
misericordia de mí, y admíteme piadosa en el dichoso número de tus felices
siervos y esclavos, y a tu grande protección, como el menor de todos ellos; y
por el afectuoso amor con que viviendo en carne mortal, viniste A Zaragoza, y
por disposición del Altísimo nos dejaste sobre el venerable Pilar que traían
los Ángeles tu sagrada Imagen, que también traían los Espíritus celestiales, te
suplico me alcances el amor de mi Dios sobre todas las cosas, de tal manera que
desprecie la honra, la vida y todo lo criado por no ofender más a mi Dios y
Señor. También te suplico, Madre
piadosísima, que, si es del agrado de mi Dios lo que deseo conseguir en esta
Novena, me lo alcances de su Divina Majestad, y si no lo es perfecciones mi
deseo, para que yo nada quiera sino lo que Dios quiere de mí, para mayor honra
y gloria suya. Amén.
—Aquí se
hará petición secreta y luego se dirá la Salve como el primer día con los Gozos
a la Virgen.
DÍA TERCERO —5 de octubre.
Por la Señal...
Acto de contrición
ORACIÓN AL SEÑOR.
Señor mío
Jesucristo, Redentor de mi alma que te
dignaste sublimar a tu Santísima Madre sobre todo el coro de Espíritus
Celestiales, que se llaman Tronos, y a muchos de ellos les mandaste hiciesen
digno trono a su Reina y la trajesen a Zaragoza para hacer dichosa a esta
monarquía de España; Suplicóte, Omnipotente
Señor, que por la intercesión y méritos de tu Santísima Madre me concedas el
perfecto amor de mi prójimo y la limpieza de mi corazón de toda culpa, para que
en él descanses como en trono de tu agrado, y yo en algún modo participe la
perfección de tus Espíritus Celestiales, para mayor honra y gloria tuya. Amén.
——Aquí se
rezarán nueve Ave-Marías a nuestra Señora en veneración de los grandes
privilegios y dones con que la ensalzó su Hijo Santísimo sobre los nueve coros
de los Ángeles.
ORACIÓN
A MARÍA
SANTÍSIMA.
Soberana Reina de los Ángeles, ten misericordia de mí, y
admíteme piadosa en el dichoso número de tus siervos y esclavos. Y por el
inefable amor con que viniste a España para hacernos del gremio de tu santísimo
Hijo e hijos de la Católica Iglesia, te suplico me
alcances el perfecto amor de mis prójimos, de tal manera, que los ame como a mí
mismo y no quiera para ellos el mal que no quiero para mí. También te suplico,
soberana Madre, que, si es del gusto de mi Dios lo que deseo en esta Novena, me
favorezcas con tan poderosa intercesión, y si no lo es, nada quiero, sino que
se cumpla en mí la voluntad Divina en tiempo y eternidad. Amén.
—Aquí se
hará petición secreta y luego se dirá la Salve como el primer día con los Gozos
a la Virgen.
DÍA CUARTO —6 de octubre.
Por la Señal...
Acto de contrición
ORACIÓN AL SEÑOR.
Señor mío
Jesucristo, que cumpliste la Divina
ley honrando a tu santísima Madre y ensalzándola sobre todo el coro de los Celestiales
Espíritus, que se llaman Dominaciones, y a muchos de ellos les mandaste la
acompañasen y trajesen a la dichosa ciudad de Zaragoza para hacer por ella
feliz a toda España; Suplicóte, Soberano Señor,
que por la intercesión y méritos de tu Madre santísima me concedas el estimable
privilegio de dominar mis desordenadas pasiones, para que vencidas estas, yo
quede en algún modo semejante a tus santos Espíritus, para mayor honra y gloria
tuya. Amén.
——Aquí se
rezarán nueve Ave-Marías a nuestra Señora en veneración de los grandes
privilegios y dones con que la ensalzó su Hijo Santísimo sobre los nueve coros
de los Ángeles.
ORACIÓN
A MARÍA
SANTÍSIMA.
Soberana
Reina de los Cielos, ten
misericordia de mí, y admíteme en el dichoso número de tus hijos, aunque soy
indignísimo de tanto favor. Y por la caridad perfecta y amor con que viniste a
España, para hacer dichosos con tu amparo a todos los españoles, te suplico me alcances el privilegio y favor de no juzgar mal de
nadie en sus operaciones, pues así mi alma será juzgada con piedad de mi Dios y
Señor. También te suplico, piadosa Madre, que si es gusto de mi Dios el
especial beneficio que pido en esta Novena, me lo alcances de tu santísimo
Hijo; y si no es de su voluntad, perfecciones mis afectos, para que en mí
siempre se cumpla la voluntad divina. Amén.
—Aquí se
hará petición secreta y luego se dirá la Salve como el primer día con los Gozos
a la Virgen.
DÍA QUINTO —7 de octubre.
Por la Señal...
Acto de contrición
ORACIÓN AL SEÑOR.
Señor mío
Jesucristo, Hijo del Eterno Padre y de María Santísima, que
sublimaste a tu digna Madre sobre todo el coro de los Espíritus Soberanos, que
se llaman Principados, y a muchos de ellos mandaste que la trajesen a España y
dejasen su sagrada Imagen sobre el santo Pilar, para consuelo de los españoles;
suplícote, Divino Señor, que por la intercesión y méritos de tu
santísima Madre me concedas el espíritu principal y potestad contra los
enemigos de mi alma, para que yo participe algo de los Espíritus Celestiales, a
mayor honra y gloria tuya. Amén.
—Aquí se
rezarán nueve Ave-Marías a nuestra Señora en veneración de los grandes
privilegios y dones con que la ensalzó su Hijo Santísimo sobre los nueve coros
de los Ángeles.
ORACIÓN
A MARÍA
SANTÍSIMA.
Soberana
Princesa y Reina de todo lo criado, ten
misericordia de mí y admíteme piadosa en el número feliz de tus esclavos. Y por
el amor grande con que viniste a España con la potestad del Altísimo para
concedernos muchos favores del Cielo, te suplico me
alcances un generoso corazón y auxilios eficaces para perdonar todas las
injurias y ofensas que me hicieren las criaturas, porque ya sé de boca de tu
santísimo Hijo, que el que no perdonare no será perdonado. También te ruego,
piadosa Madre, que, si el favor particular que pido en esta Novena no me conviniere
para mi salvación eterna, se me niegue, porque solo deseo que en mí se cumpla
la Divina voluntad. Amén.
—Aquí se
hará petición secreta y luego se dirá la Salve como el primer día con los Gozos
a la Virgen.
DÍA SEXTO —8 de octubre.
Por la Señal...
Acto de contrición
ORACIÓN AL SEÑOR.
Señor mío Jesucristo,
Hijo de Dios vivo, que
te dígnate levantar a tu Madre santísima sobre el coro de los Espíritus que se
llaman Potestades, y a muchos de ellos les mandaste la asistiesen y acompañasen
a España, sirviéndola como a su legítima Reina y Señora; Suplicóte, divino Señor de todo lo criado, que reprimas a todos mis
enemigos para que libremente yo te amé y nunca te ofenda, sino que en todo
tiempo cumpla tu santísima voluntad. Amén.
—Aquí se
rezarán nueve Ave-Marías a nuestra Señora en veneración de los grandes
privilegios y dones con que la ensalzó su Hijo Santísimo sobre los nueve coros
de los Ángeles.
ORACIÓN
A MARÍA
SANTÍSIMA.
Soberana
Reina de los Ángeles superior
a todas las Potestades, ten misericordia de mí y admíteme piadosa en el dichoso
número de tus siervos. Y por él amor grande con que viniste a España con
especial poder para concedernos muchas bendiciones y favores del Cielo, té suplico me alcances el precioso don de la perseverancia en el
servicio de mi Dios, para que yo nunca jamás te ofenda, sino que siempre viva y
me conserve en tu santo temor y amor. También te suplico, divina Madre, me
concedas el favor particular que pido en esta Novena, si me conviene para el
mayor bien de mi alma. Los Ángeles te alaben. Amén.
—Aquí se
hará petición secreta y luego se dirá la Salve como el primer día con los Gozos
a la Virgen.
DÍA SEPTIMO —9 de octubre.
Por la Señal...
Acto de contrición
ORACIÓN AL SEÑOR.
Señor mío
Jesucristo, Hijo de María Santísima y Dios Omnipotente, que sublimaste a tu
santísima Madre sobre el Celestial coro de los Espíritus, que se llaman
Virtudes, y a muchos de ellos ordenaste viniesen acompañando a su Reina cuando
en persona Real vino a Zaragoza para hacer feliz a toda España; Suplicóte, Soberano Señor, me concedas las virtudes verdaderas,
para que en todo yo trabaje y obre para mayor honra y gloria tuya. Amén.
—Aquí se
rezarán nueve Ave-Marías a nuestra Señora en veneración de los grandes
privilegios y dones con que la ensalzó su Hijo Santísimo sobre los nueve coros
de los Ángeles.
ORACIÓN
A MARÍA SANTÍSIMA.
Soberana
Reina de los Ángeles y Madre de pecadores,
ten
misericordia de mí y admíteme piadosa en el dichoso número de tus hijos, aunque
no lo merezco. Y por el grande amor con que viniste a Zaragoza y nos dejaste
sobre la preciosa columna tu sagrada Imagen, te suplico me alcances una buena muerte en servicio de mi Dios,
hasta mi última respiración; que reciba los Sacramentos de la Iglesia Católica
y me conforten en aquella hora los Sacerdotes y Ministros del Altísimo. También
te suplico, Madre Clementísima, que si me conviene el favor particular que pido
en esta Novena, me lo consigas para honra y gloria de mi Dios y tuya. Amén.
—Aquí se
hará petición secreta y luego se dirá la Salve como el primer día con los Gozos
a la Virgen.
DÍA OCTAVO —10 de octubre.
Por la Señal...
Acto de contrición
ORACIÓN AL SEÑOR.
Señor mío
Jesucristo, Hijo de Dios vivo y de María Santísima, que
te dignaste sublimar a tu Santísima Madre sobre todo el coro de Querubines, y a
muchos de ellos les mandaste sirviesen y acompañasen a su Reina cuando vino a
España para la mayor felicidad y buena fortuna de esta monarquía; Suplicóte, Soberano Señor, que me concedas sabiduría del Cielo y
ciencia de los Santos, para que así participe en alguna manera de la perfección
de los Querubines para mayor honra tuya. Amén.
—Aquí se
rezarán nueve Ave-Marías a nuestra Señora en veneración de los grandes
privilegios y dones con que la ensalzó su Hijo Santísimo sobre los nueve coros
de los Ángeles.
ORACIÓN
A MARÍA
SANTÍSIMA.
Soberana
Reina de los Querubines y todos los Ángeles, ten
misericordia de mí, y admíteme piadosa en el dichoso número de tus devotos. Y
por el especial amor con que viniste a España y dejaste en ella tu Imagen, te
suplico me asistas en el juicio particular de mi alma, en el cual desde ahora
para entonces apelo de la rectísima justicia de mi Dios a su infinita bondad y
misericordia, a los infinitos merecimientos de la santísima vida, pasión y
muerte de mi Señor Jesucristo, y a tu poderosa intercesión, para que mi alma no
salga condenada. También te suplico,
piadosa Madre, que si me conviene para mi salvación el favor especial que pido
en esta Novena, me lo consigas de la liberalidad Divina y sea para mayor gloria
tuya. Amén.
—Aquí se
hará petición secreta y luego se dirá la Salve como el primer día con los Gozos
a la Virgen.
DÍA NOVENO —11 de octubre.
Por la Señal...
Acto de contrición
ORACIÓN AL SEÑOR.
Señor mío
Jesucristo, Dios Omnipotente y hombre verdadero, Hijo de María Santísima, que sublimaste a tu digna
Madre sobre todo el coro de los Serafines, haciéndola tanto más excelente y
superior a todos los nueve coros de los Ángeles, cuanto es más noble y
excelente el nombre de Madre que el de siervos; y a muchos de los Serafines
mandaste trajesen a su Reina y Señora a la dichosa ciudad de Zaragoza, para
ennoblecer y enriquecer de celestiales dones y favores a toda la monarquía de
España; suplicóte, piadosísimo Señor, que enciendas y abrases mi corazón en
fuego santo de tu amor divino, para que así tenga alguna participación de los
excelentísimos Serafines, para mayor honra y gloria de tu santo nombre. Amén.
—Aquí se
rezarán nueve Ave-Marías a nuestra Señora en veneración de los grandes
privilegios y dones con que la ensalzó su Hijo Santísimo sobre los nueve coros
de los Ángeles.
ORACIÓN
A MARÍA
SANTÍSIMA.
Suprema
Reina de los Serafines y Señora de todo lo criado, ten misericordia
de mí, y admíteme piadosa en el dichoso número de tus felices siervos y esclavos
y a tu soberana protección como al menor de todos ellos. Y por el excelentísimo
amor y perfecta caridad con que viniste a nuestra España, viviendo aún en carne
mortal, para afirmaren ella la columna incontrastable de nuestra Fe Católica, y
en prendas de tu poderosa protección nos dejaste tu sagrada Imagen; te suplico,
divina Madre, me concedas que si después de mi muerte fuere puesta mi alma en
las penas del Purgatorio, por la infinita misericordia de mi Dios, me asistas
piadosa, para que cuanto antes sea purificada y absuelta y yo llegue sin dilación
a mi último fin y vea claramente a mi Dios y Señor, que me ha dado todo el ser que
tengo, y me emplee por toda la eternidad en su santo servicio, en sus divinas
alabanzas y en cumplir todas sus santísimas voluntades, sin peligro de perderle.
También te suplico, piadosa Madre que si es gusto de mi Dios el
favor especial que pido en esta Novena, intercedas para que se me conceda, y
todo sea á mayor honra y gloria de mi Dios y de su santísimo Nombre. Amén.
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