jueves, 31 de agosto de 2023

NOVENA EN HONOR A SANTA ROSA DE LIMA.

 

Novena basada en la Vida de Santa Rosa de Lima. El Acto de contrición probablemente es de autoría de Santa Rosa de Lima, los Gozos son tradicionales, sin autor ni fecha conocidos.

COMENZAMOS: 21 de agosto.

FINALIZAMOS: 29 de agosto.

FESTIVIDAD VETUS ORDO: 30 de agosto.   

NOVENA EN HONOR A SANTA ROSA DE SANTA MARÍA, PATRONA DE LIMA Y PERÚ 

Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos Señor Dios nuestro. En el nombre del Padre, y del Hijo , y del Espíritu Santo. Amén.

ACTO DE CONTRICIÓN

   Señor mío, Jesucristo, Dios y hombre verdadero, Creador y Redentor mío, a mí me pesa de haberos ofendido, por ser Vos quien sois y porque os amo sobre todas las cosas. Dios mío y verdadero esposo de mi alma y alegría de mi corazón, yo, os quiero amar, benignísimo Jesús, con aquel perfectísimo amor, eficacísimo amor, incontrastable amor, invencible amor, que todos los cortesanos del Cielo os aman, y más os quisiera amar, Dios de mi corazón y de mi vida. Quisiera amar, regalo mío, tanto como la Santísima Virgen os ama, y más os quisiera amar, salud y alegría mía y de mi alma. Quisiera amar tanto a vos, Dios mío, como Vos os amáis. Abráseme yo, consúmame yo, en fuego de divino amor, benignísimo Jesús. Amén.

ORACIÓN INICIAL

   Oh esclarecida Virgen, Rosa celestial, que con el buen olor de vuestras virtudes habéis llenado de fragancia a toda la Iglesia de Dios y merecido en la gloria una corona inmarcesible; a vuestra protección acudimos para que nos alcances de vuestro celestial Esposo un corazón desprendido de las vanidades del mundo y lleno de amor divino. (Mencionar aquí la gracia que se desea obtener)

—Rezar un Padre nuestro, Ave María y Gloria.

DÍA PRIMERO - 21 DE AGOSTO

LA CUNA DE SANTA ROSA DE LIMA

   Rosa, que recibió en el bautismo el nombre de Isabel por ser de su abuelita, nació el 20 de abril de 1586, y sus padres fueron Gaspar Flores y María de Oliva, pertenecientes a una familia acomodada de Lima, capital del Perú. Cierto día en que la niña descansaba en su cuna, la contemplaba amorosa su feliz madre en compañía de familiares y amigos, cuando vio admirada entreabrir en su lindo rostro los rojos y frescos pétalos de una rosa magnífica. Extraordinariamente sorprendida, tomó gozosa en brazos a su hijita y acariciándola y colmándola de besos le dijo: «Tú serás mi Rosa». Cuando el gran Santo Toribio de Mogrovejo, arzobispo de Lima y apóstol del Perú, le administró el Sacramento de la confirmación, la llamó también Rosa, aunque desconocía aquella milagrosa circunstancia con que el Cielo se adelantara a distinguirla.

 

   Llegada la adolescencia, oía la niña ponderar su hermosura, e ignorante del prodigio referido, creía que por ser bella la llamaban Rosa. Temió su casta humildad y, postrada a los pies de la Virgen, le contó con infantil sencillez la causa de su pena. Se le apareció entonces la Santísima Virgen con el niño Jesús en los brazos y le dijo: «Gusta a mi divino Hijo que te llamen Rosa, pero desea que a tan precioso nombre añadas el mío; por tanto, de hoy en adelante habrás de llamarte Rosa de Santa María».

ORACIÓN FINAL

   ¡Oh flor la más hermosa y delicada que ha producido la tierra americana!, portento de la gracia y modelo de las almas que desean seguir de cerca las huellas del Divino Maestro, obtened para nosotros las bendiciones del Señor. Proteged a la Iglesia, sostened a las almas buenas, y apartad del pueblo cristiano las tinieblas de los errores, para que brille siempre majestuosa la luz de la Fe y para que Jesús, vida nuestra, reine en las inteligencias de todos los hombres y nos admita algún día en su eterna y dichosa mansión. Amén.

GOZOS EN HONOR A SANTA ROSA DE LIMA

Del pensil de la piedad

Fuiste rosa en el dolor:

Logremos por tu favor

Fragancias de caridad.

   

Liberal produjo Lima

No solo plata preciosa,

Sino una fragante rosa

De más mérito y estima,

La que en su temprana edad

De la Iglesia fue esplendor:

Logremos por tu favor

Fragancias de caridad.

 

Apenas naciste, Rosa,

Cuando apenas te previenes,

Pues de espinas a tus sienes,

Tejes corona preciosa:

Ese adorno fue en verdad

Hechizo al divino amor:

Logremos por tu favor

Fragancias de caridad.

 

La Gracia y naturaleza

En competencia reñida;

Si ésta dio un lustro a tu vida,

Timbre aquella a tu grandeza,

Logrando en tan tierna edad

Ser Esposa del Señor:

Logremos por tu favor

Fragancias de caridad.

 

Quejas hiciste amorosa

A la gran Reina María,

Pues te trocaron un día

De Isabel el nombre en Rosa,

Y ella añadió a tu humildad

El suyo propio de María, ¡oh, qué honor!:

Logremos por tu favor

Fragancias de caridad.

 

Con el hábito glorioso

De Guzmán, luces tan bella

Como la mejor estrella

De su cielo luminoso:

Imitando tu bondad

De Catalina el ardor:

Logremos por tu favor

Fragancias de caridad.

 

Con humildad excelente

Suplicaste a una criada,

Que como a mujer malvada

Te pise, escupa y afrente,

Gozando tu santidad

Con el desprecio mayor:

Logremos por tu favor

Fragancias de caridad.

 

Tanto la cruz apreciaste,

Que, en las horas de reposo,

Por imitar a tu Esposo,

En tus hombros la cargaste:

Mas era su gravedad

Carga leve a tu fervor:

Logremos por tu favor

Fragancias de caridad.

 

Pediste un día a tu Esposo

Si es cierta tu salvación,

Y él te dio contestación

Con un sí cariñoso,

Y con tal seguridad,

De punto subió tu amor:

Logremos por tu favor

Fragancias de caridad.

 

Cruz, vigilia, ayuno y celo

Y oración muy continuada

Fueron llave dorada

Con la que abriste el cielo,

Dejaste a la humanidad

Pasmada con tal rigor:

Logremos por tu favor

Fragancias de caridad.

 

Para los que en ningún modo

Sanar pudo medicina,

Fuiste triaca divina

Que da la salud en todo.

Donde medió tu piedad

No hubo pena ni dolor:

Logremos por tu favor

Fragancias de caridad.

 

Viéndote el amor divino

Abrasada mariposa,

Quiso trasladarte, Rosa,

A vergel más peregrino:

Nuncio de aquesta verdad

Fue el mismo supremo Autor:

Logremos por tu favor

Fragancias de caridad.

 

Llegado el dichoso día

Que al seno de Dios te llama,

Alrededor de tu cama

Se oyó dulce melodía,

Cantando tu santidad

Con angélico primor:

Logremos por tu favor

Fragancias de caridad.

 

Ya que os miráis coronada

En la celestial Sion,

Amparad en la aflicción

A quien os llama abogada,

Y ejerced vuestra piedad

En cualquier mal y dolor:

Logremos por tu favor

Fragancias de caridad.

    

Del pensil de la piedad

Fuiste rosa en el dolor:

Logremos por tu favor

Fragancias de caridad.

Antífona: Una virgen se ocupa de las cosas del Señor, a fin de ser santa de cuerpo y alma. 

. Ruega por nosotros, bienaventurada Santa Rosa Limana.

. Para que seamos dignos de las promesas de Cristo.

ORACIÓN

   Oh Dios poderoso, dispensador de todos los bienes, que has provisto a la bienaventurada Santa Rosa con el rocío de la gracia celestial, y la hiciste brillar en las Indias con el fulgor de la virginidad y de la paciencia, concédenos a nosotros tus siervos, la gracia de correr tras el olor de sus perfumes, y merecer así llegar a ser un día el buen olor de Cristo, que contigo vive y reina en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos. Amén.

En el nombre del Padre, y del Hijo , y del Espíritu Santo. Amén.

martes, 29 de agosto de 2023

NOVENA EN HONRA Y GLORIA DEL GRAN PADRE Y DOCTOR DE LA IGLESIA, SAN AGUSTÍN.

 

Patriarca de muchas Religiones, y a quien Cristo encomendó su iglesia, llamándole GRAN PADRE

Esta Novena fue compuesta por un hijo de su Sagrada Religión.

La saca a luz un devoto del Santo, agradecido de los favores que de su mano ha recibido.

Establecimiento tipográfico dé Pedro J . de Lopetedi. León 1859.

COMENZAMOS: 19 de agosto.

FINALIZAMOS: 27 de agosto.

FESTIVIDAD VETUS ORDO: 28 de agosto.

ADVERTENCIA

   Adviértase, que esta Novena se imprime a costa de un Devoto por agradecido al Santo, de haberle consolado en todas sus necesidades; y lo mismo hará con los que hicieren esta Novena.

   Y también se advierte, que en todos los días de la Octava del Glorioso Santo hay Jubileo de Porciúncula en su Iglesia de San Felipe el Real de esta Corte.

ITRODUCCIÓN

   Necesitando nuestra tibieza de la intercesión de los Santos, para que con eficacia lleguen nuestros ruegos a los divinos oídos, siendo S. Agustín aquel Santo tan amante de Dios, y tan amado suyo, que habiéndole encomendado en la tierra la dirección de las Almas, vio Santa Gertrudis en el Cielo, que Dios llenaba de bendiciones a los Devotos de este Gran Patriarca; interés grande será nuestro el solicitar una protección tan provechosa, para conseguir cuanto pidiéremos al Altísimo en nuestras necesidades. A este, fin tan útil se dirige el escribir esta Novena, para que, alabando a Dios en las gracias, de que dotó a este excelso Padre en el mundo, sea nuestro intercesor en el Cielo, enderezando al Señor, por sus manos nuestras súplicas.

   Esta novena se podrá hacer en cualquier tiempo del año, pues para oírnos Dios, no hay tiempo importuno; pero será muy congruo a la devoción hacerla desde el día diez y nueve de Agosto, hasta un día antes del veinte y ocho, en que nuestra Madre la Iglesia celebra la fiesta de este gloriosísimo Padre, y fué también el día de su Conversión milagrosa: o puede comenzarse desde este día, hasta el siguiente a su octava; aunque no sería fuera de propósito dedicarse a su devoción, desde el día 27 de Abril, hasta el día 5 de Mayo, en que  los hijos de Agustino celebran su Conversión, después de aplaudir las glorias de Su Madre Santa Mónica, a cuyas lágrimas se debió lograr la Iglesia un tan gran Defensor suyo.

   Cualquiera, que determinare hacer esta Novena, procure disponerse con un verdadero arrepentimiento de sus pecados, confiese, y comulgue el primer día, absteniéndose en este, y todos los demás de culpa grave, y ejercitándose en buenas obras; porque nada merecen ruegos, que proceden de un corazón dañado y asi para conseguir, es menester no estar en el desagrado divino, pues mal puede mirar el Señor con ojos benignos, a quien le tiene agraviado.

Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos Señor Dios nuestro. En el nombre del Padre, y del Hijo , y del Espíritu Santo. Amén.

—Postrados humildemente, se repetirán tres veces:

Con todo mi amor te amo,

Jesús, por ser tú quién eres,

Pésame de haber pecado.

Propongo nunca ofenderte.

ORACIÓN PARA TODOS LOS DÍAS A LA TRINIDAD SANTÍSIMA.

   Sacrosanta, individua Trinidad Beatísima, en tres personas distintas un sólo Dios Verdadero, a cuya presencia se postran las mas altas inteligencias, y claman incesantemente los Serafines: Santo, Santo, Santo , Señor Dios de los Ejércitos, supuesto, que os vuestra voluntad, que los mortales nos valgamos en nuestras necesidades de la intercesión de vuestros amigos los Santos, que os gozan eternamente, siendo el Gran Doctor, y Sol de la Iglesia San Agustín, tan amante, y favorecido vuestro, que pusisteis en él con colores más vivos, vuestra imagen, y semejanza, en un entendimiento casi divino en una voluntad todo incendios de vuestro amor, y del prójimo, llenando su corazón de delicias a la Bienaventuranza: Conózcase Omnipotente Señor lo que le amáis, en la piedad, y prontitud, con qué concedéis nuestras súplicas, mediando su intercesión.

   Y vos, benigno Padre Agustino, Abogado y Fortaleza de todos los atribulados, inclinaos al Trono de la Trinidad Santísima, y representad nuestras miserias, con palabras dignas de nuestra Sabiduría y eficacia, correspondiente a vuestro piadoso amor. Supisteis, por experiencia, los trabajos, las congojas, y plagas, que se padecen en este mar proceloso, donde no hay rumbo sin riesgo, ni navegación sin escollo; y asi, ponemos humildes en vuestra dirección, segura todos nuestros pasos inciertos, para que los conduzcáis al puerto de la salud, que ese Dios Misericordioso, que no quiere la muerte del pecador, sino que se convierta y viva; y asi, pedidle Padre amoroso, que no nos niegue la entrada del puerto, a que anhelamos solícitos, pues es nuestro principio, y fin y nuestro norte único, que vive y Reyna en Trinidad perfecta, por los siglos de los siglos. Amén.

—Se dirá ahora tres veces Padre nuestro, y tres veces Ave María; y a cada Padre nuestro y Ave María, Gloria Patri, el Filio, el Spiritui Santo, en honra, y gloria de la Trinidad Santísima y del grande amor, que San Agustín tuvo siempre a este Misterio Divino, de cuyos profundos Arcanos escribió el Santo Doctor quince libros.

PRIMER DÍA —19 de agosto.

DOLOR DE LOS PECADOS.

   Gloriosísimo Padre, y Patriarca San Agustín pecador maravilloso, que, a repetidos golpes de un dolor grande, supisteis labrar el hierro más tenáz de tus continuas culpas. Justo portentoso, que haciendo escala de los pecados, pisándolos, y descubriéndolos, subiste a la Bienaventuranza; atiende a mi miseria, ayuda mi tibieza, saquen tus ya dorados yerros fuego de mi empedernido corazón, para que encendido en llamas del Amor Divino, me arrepienta de mis culpas, y pisándolas con este arrepentimiento, las descubra al Médico Divino; y asi, dejándolas de todo punto, me encamine a solo amar a Dios en quien creo, y todo lo que me manda creer la Santa Madre Iglesia: en quien espero me ha de perdonar las culpas, porque me pesa haberlas cometido, solo por ser un señor tan perfecto, y piadoso, a quien de todo corazón me pesa haber ofendido y propongo no ofenderle mas ayudado con la gracia de mí Señor Jesucristo,  que vive y reina con el Padre, en unidad del Espíritu Santo, Dios por todos los siglos de los siglos. Amén.

ORACIÓN PARA TODOS LOS DÍAS

   Salve, Gran Padre, a quien Cristo encomendó su Iglesia.

   Salve, Ángel Custodio, que las guardas, y defiendes, sirviéndola de atalaya tu corazón celoso.

   Salve, Querubín Sabio, que con la espada de tu pluma defiendes, la planta del Espiritual Paraíso.

   Salve Trono de la Trinidad Santísima.

   Salve piélago de Sabiduría, abismo de humildad, y Etna del divino incendio.

   Salve Clarín de Sabios y armonía de los Cielos, Martillo de los Herejes, terror del Infierno, y Protector de Cristianos.

   Salve Lengua y pluma del Divino Espíritu, Índice vivo de la Trinidad, clara imagen, y semejanza suya.

   Salve, una y mil veces Gran Padre Agustino, para que por tu intercesión todos nos salvemos.

. Rogad por nosotros Bienaventurado Padre San Agustín.

.  Para que seamos dignos de las promesas de Cristo.

ORACION

   Dios, que revelando al Bienaventurado Padre Agustino los más Arcanos Misterios de tu Sabiduría, y excitando en su corazón las llamas de la Caridad Divina renovaste en tu Iglesia el milagro de la Columna de Nube y Fuego; concédenos, que con su guía pasemos tan felizmente los peligros de esta vida, que merezcamos llegar a la prometida Patria, por Cristo Nuestro Señor. Amén.

En el nombre del Padre, y del Hijo , y del Espíritu Santo. Amén.

lunes, 28 de agosto de 2023

NOVENA A SAN LUIS REY DE FRANCIA.

 


Novena compuesta por el padre Leopoldo Jerónimo de Puig, capellán real y administrador del Real Hospital de San Luis de los Franceses en Madrid, y con licencia otorgada por el vicario de la villa de Madrid en el año 1744. Los Gozos, de origen valenciano, son sin fecha ni autor conocidos.

COMENZAMOS: 16 de agosto.

FINALIZAMOS: 24 de agosto.

FESTIVIDAD: 25 de agosto.

Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos Señor Dios nuestro. En el nombre del Padre, y del Hijo , y del Espíritu Santo. Amén.

ACTO DE CONTRICIÓN

   Señor mío Jesucristo, Dios y Hombre verdadero, Criador y Redentor mío, por ser Vos quien sois y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de haberos ofendido: propongo, con vuestra gracia, nunca más pecar, y espero en vuestra misericordia, que me habéis de perdonar y salvar. Amén.

ORACIÓN PARA TODOS LOS DÍAS

   Omnipotente Dios y Señor nuestro, Rey Supremo de los Cielos y la tierra, que con vuestra palabra habéis sacado a todas las criaturas del profundo abismo de la nada, y formasteis al hombre a vuestra imagen y semejanza, haciéndole complemento de vuestras maravillas: pues vuestro Hijo Santísimo nos enseñó a llamaros Padre, dándonos confianza para invocaros, hacednos dignos hijos vuestros, santificando en nosotros vuestro excelso Nombre: dadnos celo de vuestra honra y de la salvación de las almas redimidas con la preciosa Sangre de vuestro Hijo Jesucristo, para que nuestra única gloria sea el que Vos seáis reconocido y adorado, y que todos pertenezcamos al Reino de vuestra Justicia por la gracia y la caridad. Atended, Señor, a la flaqueza y miseria de nuestro ser, y concedednos que, fortificada nuestra alma por la participación de los Sacramentos, solo suspire por Vos, único objeto de su amor, y que ilustrada por medio de vuestra palabra comprenda los Misterios altísimos que el mismo Jesucristo se dignó revelarnos. Dadnos un corazón dócil a vuestras inspiraciones, piadoso para con los prójimos, paciente en las tribulaciones, humilde en las prosperidades, y mortificado para no dejarse vencer de las aficiones terrenas. Recibid benigno el sacrificio de nuestras oraciones, y purificad nuestra conciencia, dándonos la fuerza y aliento que nuestra debilidad necesita para la perfecta práctica de vuestra Santa Ley; y concedednos el favor que ahora os pedimos, y la perseverancia en vuestra gracia. Por el mismo Jesucristo Hijo vuestro, nuestro Señor, que con Vos y el Espíritu Santo vive y reina, Dios, por todos los siglos de los siglos. Amén.

DÍA PRIMERO - 16 DE AGOSTO

DEL GRANDE AMOR QUE SAN LUIS TUVO A DIOS.

   Desde su infancia puso San Luis su principal cuidado en arreglar su corazón a la Divina Ley. Le había criado su madre Doña Blanca de Castilla en el temor de Dios, repitiéndole muchas veces que antes elegiría verle muerto que en pecado mortal. Conservó toda su vida la gracia del Bautismo, y entre los cuidados del gobierno y las distracciones y ejemplos de la Corte mantuvo su espíritu puro de todo afecto terreno, dirigiendo siempre sus acciones a la mayor gloria de Dios. Este deseo de agradarle le hizo resolver a la heroica y gloriosa acción de conquistar la Tierra Santa: y sin que los muchos trabajos que allí padeció entibiasen su fervoroso celo, se avivaron más sus deseos de restablecer la Fe de Jesucristo en el África; en cuya costa, consumido más del fuego del Amor Divino que de la peste, dio su alma al Señor entre afectuosos actos de Religión y de celo por la propagación de su Santo Nombre.

REFLEXIÓN

   Dios siempre rico en misericordias, que nos creó de la nada, y conserva liberal y piadoso, no sació la excesiva caridad y amor que nos tiene, sino enviándonos su Unigénito Hijo para nuestra Redención, adoptándonos por hijos suyos y preparándonos una eterna felicidad. En recompensa solo quiere de nosotros que empleemos nuestro corazón en amarle únicamente, observando su Santa Ley. Consagrémosle, pues, todas nuestras acciones, y reconocidos a la honra y utilidad, que logramos en ser amados de su Bondad, aspiremos en todo tiempo a cumplir sus preceptos, no llevando otro fin que el de agradarle y glorificar su Santo Nombre.

ORACIÓN PARA ESTE DÍA

   Dios y Señor nuestro, que en muestra del amor que nos tenéis, enviasteis al mundo a vuestro Unigénito Hijo Jesucristo para que se ofreciese Hostia pura e inmaculada en el Ara de la Cruz por la remisión de nuestros pecados: admitid estos humildes ruegos, unidos a los méritos del mismo Jesucristo, y por ellos, y la intercesión de vuestro Siervo San Luis, concedednos un corazón puro y fervoroso, con que despreciando todo lo terreno, os amemos y apreciemos únicamente. Confesamos que nuestra indignidad no merece la excelente prerrogativa de ser amados de Vos, origen de todo bien, y de que nos mandéis emplear en vuestro amor: pero Vos, Señor, que podéis hacer justos y santos a los inmundos y pecadores, purificaréis nuestro espíritu, haciéndole sentir la dulzura de vuestra suave presencia, para que, amándoos únicamente, solo anhelemos agradaros y cumplir vuestra Santa voluntad. Así lo esperamos por el mismo Jesucristo Hijo vuestro nuestro Señor, que con Vos y el Espíritu Santo vive y reina, Dios, por todos los siglos de los siglos. Amén.

—Se rezará tres veces el Padre nuestro y Ave María, con Gloria Patri; y se concluirá con los siguientes Gozos, Antífona, Versículos y Oración.

GOZOS A SAN LUIS REY DE FRANCIA.

Ejemplar esclarecido

De reyes, de Francia honor:

Seáis nuestro intercesor,

San Luis de Dios querido.

  

De niño fuiste criado

En temor santo de Dios;

De virtudes fuisteis vos

Desde muy niño adornado;

En amor santo encendido,

Con la edad creció el ardor:

Seáis nuestro intercesor,

San Luis de Dios querido.

  

Admirable en abstinencia,

En oración fervoroso,

Del honor de Dios celoso,

De cilicios la frecuencia

Os ha hecho esclarecido

Santo de marca mayor:

Seáis nuestro intercesor,

San Luis de Dios querido.

  

Los pobres y desvalidos

Fueron vuestros cortesanos,

Les lavabais pies y manos,

A más de bien socorridos,

Darles alivio cumplido

Procuraba vuestro amor:

Seáis nuestro intercesor,

San Luis de Dios querido.

  

Del gran Serafín llagado

Hijo, en su Orden Tercero,

Ilustraste al mundo entero

Habiéndole despreciado,

Y aunque de él escarnecido,

Despreciáis tal burlador:

Seáis nuestro intercesor,

San Luis de Dios querido.

  

Con católico valor,

Procurasteis conquistar

La tierra en que quiso obrar

La salud el Redentor;

Con ejército lucido

Fuiste del turco terror:

Seáis nuestro intercesor,

San Luis de Dios querido.

  

Vuestro ejército infectó

La peste, plaga cruel;

Y aunque fuisteis del infiel

Prisionero, no logró

El pacto, que envanecido

Os propuso su furor:

Seáis nuestro intercesor,

San Luis de Dios querido.

  

Segunda vez embestís

Al turco, que tanto infesta;

Pero herido de la peste

Vuestro fin no conseguís:

Sobre Túnez de ella herido

Volvéis el alma al Redentor:

Seáis nuestro intercesor,

San Luis de Dios querido.

  

Lamparones, que es mal fiero,

Curáis con facilidad,

Y a cualquier enfermedad

Remedio dais por entero;

Atento está vuestro oído

A quien os pide favor:

Seáis nuestro intercesor,

San Luis de Dios querido.

  

Miradnos siempre propicio

En cualquier tribulación,

Y con vuestra intercesión

Libradnos de todo vicio;

Con vuestro favor vencido

Sea el pecado y error:

Seáis nuestro intercesor,

San Luis de Dios querido.

  

Pues que ejemplar habéis sido

De reyes, de Francia honor:

Seáis nuestro intercesor,

San Luis de Dios querido.

Antífona: Este gran Rey sustentó en su vida la Casa del Señor, y fortaleció en sus días el Templo: miró por la felicidad de su Pueblo, y le libró de sus enemigos.

. El justo florecerá como la palma,

. Y se multiplicará como el cedro del Líbano.

ORACIÓN

   Dios, que del Reino de la tierra trasladasteis al Bienaventurado Confesor San Luis a la Gloria de la Celestial Patria: concedednos por su intercesión y méritos, que logremos igual suerte en la compañía del Rey de los Reyes, Jesucristo Hijo vuestro. Atended propicio a los deseos de nuestro Rey Católico, concediéndole feliz y tranquilo gobierno, y victoria contra los enemigos de vuestro Santo Nombre, para gloria vuestra y beneficio de su pueblo. Por el mismo Jesucristo Hijo vuestro, nuestro Señor, que con Vos y el Espíritu Santo vive y reina, Dios, por los siglos de los siglos. Amén.

En el nombre del Padre, y del Hijo , y del Espíritu Santo. Amén.