martes, 2 de diciembre de 2025

NOVENA EN HONOR DE LA INMACULADA CONCEPCIÓN DE MARÍA.

 

Sacado del libro Anuario de María, o el verdadero siervo de la Virgen Santísima.  

Aprobado en Roma y presentado a la Santidad de Gregorio XVI, por M. Menghi–D’ Arville, Protonotario apostólico.

Aprobado y mandado a reimprimir para los fieles devotos de la Santísima Virgen por el Illmo. Sr. D. Juan Manuel Irisarri y Peralta, arzobispo de Cesarea, Dean de esta santa Iglesia metropolitana y Vicario capitular del arzobispado de México. Año 1846.

 

COMENZAMOS: 29 de noviembre.

FINALIZAMOS: 7 de diciembre.

FESTIVIDAD: 8 de diciembre.

 

ADVERTENCIA

 

   Habiéndose obtenido dos gracias extraordinarias, una espiritual, otra temporal, por medio de esta piadosa Novena manuscrita, hecha en honor de la Virgen Santísima concebida sin pecado, y delante de una imágen pintada sobre el modelo de la Medalla de Francia, llamada Milagrosa; el autor a creído que su publicación seria del agrado de los devotos de la Virgen Santísima, al paso que les serviría de grande utilidad, porque les ofrece una nueva ocasión de reanimar su confianza en la inagotable bondad de esta Madre de misericordia.

   Por este motivo ha querido añadirla a su Anuario.

   Siendo el objeto principal de esta Novena honrar a María en el misterio de su Concepción inmaculada, será conveniente hacerla delante de una imágen que represente a la Virgen en este misterio: y sin duda una de las que pueden adoptarse con más fruto y provecho es la llamada Medalla milagrosa.

   Será también un excelente medio para sacar fruto de esta Novena, el confesar y comulgar en uno de los nueve días, preparándose desde el día primero para recibir estos dos sacramentos, tan propios para merecernos los más señalados beneficios de la protección de la Madre de Dios.

   Asimismo, será muy provechoso oír la santa misa todos los días en que se haga la presente Novena, y practicar alguna obra de caridad cristiana, o mortificarse voluntariamente en alguna cosa en honor de María concebida sin pe

cado.

   Siguiendo estos consejos, es de esperar que María oirá las súplicas que se la dirijan, celebrando por nueve días consecutivos la memoria de un misterio que tanto la honra y glorifica, y que Dios concederá las gracias que se le pidan por la intercesión de su Santísima Madre concebida sin pecado.

 

NOVENA DE LA INMACULADA CONCEPCIÓN DE MARÍA.

 

Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos Señor Dios nuestro. En el nombre del Padre, y del Hijo , y del Espíritu Santo. Amén.

 

ACTO DE CONTRICIÓN

 

   Pésame, Señor, de todo corazón de haberos ofendido por ser Vos quien sois, y porque os amo sobre todas las cosas, y propongo firmemente la enmienda.

DIA PRIMERO —29 de noviembre.

 

En este día honrareis a María concebida sin pecado, como la más perfecta de todas las criaturas, y os consagrareis a ella.

 

ORACIÓN


   ¡Oh María concebida sin pecado! Así como nadie es capaz de apreciar bastante vuestra dignidad, tampoco hay ninguno que sea capaz de tributaros todo el honor de que sois digna. ¡Ay! ¿Qué podré yo hacer, miserable pecador, para honraros? Sin embargo, soberana Señora del mundo, ya que vuestra bondad y vuestra misericordia igualan a vuestro poder, ya que no desecháis los homenajes de un corazón lleno de vuestro amor, dignaos admitir los que os son debidos por tantos títulos.

   ¡Oh Madre de mi Dios y Redentor, que reináis sobre todos los serafines, y en presencia de la cual la majestad de todos los reyes de la tierra no es más que una sombra vana! Permitidme que yo os tribute el honor más sincero, más humilde y más profundo, después del que debo tributar a mi Dios.

   Con la más grande alegría de mi corazón os reconozco por mi soberana Señora, y me considero feliz en conoceros, serviros y contarme en el número de vuestros hijos. Pero ya que mi bajeza me impide poderos ofrecer cosas que sean dignas de vos, agrego mis homenajes a los de toda la corte celestial y a los honores que habéis recibido de Jesucristo vuestro Hijo.

   Yo me consagro a vos, ¡oh Virgen Santísima! recibidme en el número de vuestros siervos, y dignaos ayudarme para cumplir los deberes que me impone este título, deberes de respeto y de obediencia, con el mas ardiente deseo de sacrificarme por la gloria de vuestro Hijo y por la vuestra. Amén.

 

ANTIFONA

 

 Tota pulchra es, María, et macula originalis non est in te. Tu gloria Jerusalem: tu lætitia Israel: tu honorificencia populi nostri. Tu advocata peccatorum. ¡Oh Maria! ¡Virgo prudentissima! ¡Mater clementissima! Ora pro nobis: intercede pro nobis ad Dominum Jesum Christum.

 

   Eres toda hermosa, María, y no hay mancha original en ti. Eres la gloria de Jerusalén; eres la alegría de Israel; eres el honor de nuestro pueblo. Eres la abogada de los pecadores. ¡Oh María! ¡Virgen Prudentísima! ¡Madre Misericordiosa! Ruega por nosotros: intercede por nosotros ante el Señor Jesucristo.

 

Letanías Lauretanas

  

Kyrie, eléison.                          Kyrie, eléison.

Christie, eléison.                      Christe, eléison.

Kyrie, eléison.                          Kyrie, eléison.

Christie, audi nos.                    Christe, audi nos.

Christe, exáudi nos.                  Christe, exáudi nos.

Pater de coelis, Deus,                          miserere nobis.

Fili, Redeptor mundi, Deus,                miserere    ”

Spiritus Sáncte Deus,                           miserere    ”

Sancta Trinitas, unus Deus,                 miserere     ”

 

Sancta María,                                Ora pro nobis

Sancta Dei Génitrix,                            ”

Sancta Virgo vírginum,                          ”

Mater Christi,                                         ”

Mater divinæ  gratiæ,

Mater puríssima,

Mater castíssima,

Mater inviolata,

Mater intemerata,

Mater immaculata,

Mater amábilis,

Mater admirábilis,

Mater Creatoris,

Mater Salvatoris,

Virgo prudentíssima,                      Ora pro nobis

Virgo veneranda,

Virgo prædicanda,

Virgo potens,

Virgo Clemens,

Virgo fidélis,

Spéculum justitiæ,

Sedes sapientiae,

Causa nostræ lætitiæ,  

Vas spirituale,

Vas honorábile,

Vas insigne devotionis,

Rosa mystica,

Turris Davídica,

Turris ebúrnea,

Domus áurea,

Fœderis arca,

Janua cœli,

Stella matutina,

Salus infirmórum,

Refugium peccatórum,

Consolatrix afflictorum,

Auxilium Christianorum,

Regina Angelorum,

Regina Patriarchárum,

Regina prophetárum,

Regina Apostolórum,

Regina Mártyrum,

Regina Confessorum,

Regina Vírginum,

Regina Sanctorum ómnium,

Regina sine labe originali concépta,

Regina in cœlum Assúmpta,

Regina sacratissimi Rosarii,

Regina pacis,                                                      Ora pro nobis.

 

Agnus Dei, qui tollis peccata mundi,                 parce nobis, Dómine.

Agnus Dei, qui tollis peccata mundi,                 exáudi nos, Dómine.

Agnus Dei, qui tollis peccata mundi,                 miserere nobis.

 

V. Per immaculatam Conceptionem purissimæ Virginis Mariæ.  Por la Inmaculada Concepción de la Purísima Virgen María.

 

R. Adjuvet nos Deus in omni necessitate, et

tribulatione. Que Dios nos ayude en toda necesidad y tribulación.

 

OREMUS (OREMOS)

 

 Deus, qui per immaculatam Virginis Conceptionem, dignum Filio tuo habitaculum præparasti, præsta, quæsumus, ut sicut ex morte

ejusdem Filii tui prævisa, eam ab omni labe

præservasti, ira nos quoque mundos ejus intercessione ad te pervenire concedas. Per eumdem Christum Dominum nostrum. Amen.

 

Oh Dios, que por la Inmaculada Concepción de la Virgen preparaste una morada digna para tu Hijo, te suplicamos que, al prever la muerte de tu Hijo, la hayas preservado de toda mancha; que también nosotros, los puros, podamos acudir a ti por su intercesión. Por Cristo nuestro Señor. Amén.


ORACION JACULATORIA.


    Bendita sea por siempre la purísima, santísima é inmaculada Concepción de la gloriosa Virgen María, Madre de Dios.

 

 Gregorio XV y Benedicto XIII han concedido cien días de indulgencia, por cada vez que se rezare esta oración jaculatoria.

  

En el nombre del Padre, y del Hijo , y del Espíritu Santo. Amén.